AMOR VS. OBSESIÓN

Alguna vez me han preguntado qué diferencia existe entre enamorarse de alguien u obsesionarse con alguien, ya que cuando te enamoras de alguien, en cierto modo, te estás obsesionando con esa persona hasta tal punto que no puedes quitártela de la cabeza.

Es verdad que el amor y la obsesión mantienen una relación muy estrecha cuando se habla de sentimientos, pero sí  que existe una gran diferencia que radica principalmente en otro factor, LA FELICIDAD, y os explicaré por qué.

Enamorarse de alguien supone despertar en uno mismo un sentimiento de apego y afecto hacia otra persona, resultado de las experiencias que has pasado con la misma y que te han hecho sentir diversas emociones. Pero obsesionarse supone un paso más allá. Es la perturbación del enamoramiento producida por el pensamiento constante de esa persona hasta tal punto de no poder dejar de pensar en ella como si fuese un objeto o trofeo que solo te pertenece a ti.

Esa deformación ocurre normalmente como consecuencia del estado psicológico del individuo, es decir, las personas que no se enamoran, sino que se obsesionan con alguien, se debe principalmente porque algo no va bien dentro de su mente, fruto de posibles traumas o trastornos de la infancia.

Y lo que realmente nos ayuda a identificar cuándo es amor u obsesión es la felicidad, según la perspectiva en que se mire claro. La persona enamorada antepone la felicidad del otro a la suya, mientras que la persona obsesionada antepone su propia felicidad a la del otro. Esto quiere decir, por ejemplo, que si estás enamorado de alguien y ese amor no es correspondido, prefieres que sea feliz y le dejas ir esperando a que encuentre a la persona con la que realmente quiere estar. Pero en el caso de la obsesión, siguiendo el mismo ejemplo, vas a hacer todo lo posible por intentar conseguir a esa persona, aunque eso signifique que puedas dañarla, para conseguir tu propia felicidad sin importar lo que el otro piense o sienta por ti.

En ciertas ocasiones no es fácil diferenciar entre una cosa u otra, pero si algún día os ocurre algo fuera de lo normal con una persona que os haga sospechar de sus sentimientos hacia vosotros, mi recomendación es que la pongáis a prueba para ver qué prefiere, si vuestra felicidad por encima de la suya o no, porque entonces puede que estéis con una persona obsesionada y no con una enamorada. De este modo, evitaréis futuros problemas que puedan conducir al desastre de vuestra vida sentimental.